Necesidad extrema

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2005
Custódio Dumas
Direitos Humanos e Desenvolvimento Comunitário

Con solo tres décadas de vida independiente, 16 años de guerra que hasta 1992 devastaron el país e indicadores que lo califican como uno de los países más desfavorecidos del mundo, el logro de los Objetivos de Desarrollo del Milenio es urgente en Mozambique. Una gobernanza transparente será esencial en este esfuerzo.

Mozambique celebra en 2005 el trigésimo aniversario como país independiente de la dominación colonial portuguesa. Su población sobrepasa los 19,4 millones[1] y está compuesta por numerosas etnias, originadas en el tronco bantú. La población urbana es mayoritariamente cristiana o musulmana y en el norte predomina esta última.

En 2004 el país adoptó una nueva Constitución que sustituye a la anterior de 1990. El marco más importante de estas constituciones es el principio del multipartidismo y la libertad de expresión, que posibilita la participación activa de diversas opiniones en la construcción de la democracia. Estos principios estaban ausentes en la primera constitución del país, adoptada bajo la ideología marxista en 1975, año de la Independencia Nacional.[2]

La nueva Constitución amplía las garantías para un pleno respeto de los derechos y libertades ciudadanos creando más órganos soberanos y mecanismos de aplicación (Artículos 56, 73 y 133).[3]

Uno de los países menos desarrollados del mundo

Mozambique es uno de los países menos desarrollados del mundo. Según el Índice de Desarrollo Humano, ocupa el lugar 171 en un total de 177 países, con un valor de 0,354.[4]

Alrededor de 70% de los habitantes de zonas suburbanas y rurales mantiene una economía doméstica basada en la agricultura de subsistencia. La inseguridad alimentaria continúa siendo un grave problema en varias regiones debido a las variaciones climáticas. Más de la mitad de la población (53%) padece desnutrición y 26% de los niños menores de cinco años tiene bajo peso en relación a su edad.[5]

La proporción de personas que vive por debajo de la línea nacional de pobreza alcanza 69,4%. Con menos de un dólar diario vive 37,9% de los habitantes y con menos de dos dólares diarios 78,4%.[6]

El crecimiento del producto bruto interno (PBI) fue cercano a 8% en 2002. El rendimiento per cápita anual se calculó en USD 230 en 2002.[7] El presupuesto del gobierno continúa sumamente dependiente de la ayuda extranjera.

Para enfrentar la pobreza extrema, en 2001 el gobierno adoptó como objetivo central el Plan de Acción para la Reducción de la Pobreza Absoluta, con la meta de promover el desarrollo humano y crear un ambiente favorable al crecimiento rápido, inclusivo y amplio.[8] Sus áreas de acción fundamentales son la educación, la salud, la agricultura y el desarrollo rural, la infraestructura básica, la buena gobernanza y la gestión macroeconómica y financiera. Este programa, además de ser totalmente desconocido por la población del país, en su mayoría analfabeta, no responde a la realidad y ha dejado en evidencia la omisión del Estado en su función de proveedor de servicios básicos.

El nuevo gobierno, electo a fines de 2004, se comprometió a poner más énfasis en el combate de la pobreza absoluta y expandir la red de saneamiento y de escuelas, sobre la base de la gobernanza participativa. Así lo declara el Plan Quinquenal de Gobierno. Pero este plan no describe acciones concretas a ser llevadas a cabo.[9] Por el momento, los esfuerzos por mejorar la calidad de vida de la población a través de la reducción de la pobreza han sido ofuscados por el alto nivel de corrupción en que vive el país, lo que aleja aún más al Estado de las metas públicas que se propone.

Vulnerabilidad

En 2002, 44% de los mozambiqueños era menor de 15 años, lo que torna urgente y prioritario el abordaje de los problemas que afectan a la infancia en el país.[10]

También requieren especial atención las cuestiones ligadas al género, ya que las mujeres constituyen un sector mayoritario y muy vulnerable. Tanto los índices de pobreza como los de analfabetismo son muy altos entre las mujeres. Según el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia, en 2000 la alfabetización alcanzó a 60% de los hombres, pero sólo a 29% de las mujeres.[11] También en ese año la mortalidad materna se calculó en 1.000 cada 100.000 nacimientos vivos.

El desempleo afecta a casi 60% de la población activa,[12] y es señalado como una de las causas de la pobreza y la criminalidad. A esto se agrega el creciente costo de vida, la inestabilidad de la moneda nacional ante la altísima inflación, el difícil acceso a los servicios públicos y el consumo de drogas.

La distribución desigual de la infraestructura, del personal calificado y de la riqueza favorece a la región sur en perjuicio de la norte. Por ejemplo, de unos 300 abogados que existen en el país, menos de 15 trabajan en el norte, donde viven casi 8 millones de habitantes.[13]

La falta de alimentos e infraestructura vial, carreteras y puentes dificulta mucho la vida de los ciudadanos. En algunas localidades, el hospital o la escuela más próximos se encuentran a una distancia de 20 a 50 kilómetros.[14]

Más de 65% de la población no tiene acceso a agua potable y dispone para su uso diario del agua de ríos, charcas y pozos caseros. El saneamiento precario y la falta de vivienda adecuada torna a las personas vulnerables a las catástrofres y las epidemias, siendo la malaria la principal y más frecuente.

Más de la mitad de analfabetos

Entre las personas de 15 años y más, 53,5% eran analfabetas en 2002.[15] De los alfabetizados, solamente 4% tiene formación superior, y en su mayoría reside en Maputo.

Los servicios de educación son ineficaces para los mozambiqueños, principalmente para las personas que viven en zonas rurales. La falta de material escolar, como libros, cuadernos y bolígrafos, la falta de maestros y la insuficiencia de locales escolares hace imposible el acceso a la educación. Si bien la enseñanza primaria básica ha sido declarada gratuita, se han hecho cobros con el pretexto del mantenimiento y la acción social de la escuela. En consecuencia, casi la mitad de los niños en edad escolar están fuera del sistema nacional de educación. En 2004, 60% de los niños y niñas ingresaron a la enseñanza primaria, pero sólo 52% de ellos llegó al quinto grado.[16]

Precaria atención de la salud

La atención de la salud también es deficitaria. Según el PNUD, en 2003 había dos médicos cada 100.000 habitantes, y en 2002 sólo 44% de los partos fueron atendidos por personal calificado. En 2002, la vacunación contra el sarampión cubrió a 58% de los menores de un año, la mortalidad infantil alcanzó 125 cada 1.000 nacidos vivos y la mortalidad de menores de cinco años 197.

El índice de prevalencia del VIH/SIDA continua siendo preocupante. La enfermedad afecta a alrededor de 16% de la población adulta,[17] y la expectativa de vida bajó a 38,1 años. De no haber sido afectados por la pandemia, los mozambiqueños tendrían una expectativa de vida de 64 años, acorde al promedio de crecimiento global.

El VIH/SIDA es, después de la malaria, la principal causa de mortalidad. Además, el número de niñas y niños huérfanos y de familias mantenidas por menores tiende a ser cada vez más elevado en los últimos diez años. En 2001 había 418 mil huérfanos de ambos padres por causa del VIH/SIDA. Se estima que un millón de niños están directamente afectados por la enfermedad.[18] La pandemia causa además la pérdida de los pocos cuadros técnicos existentes. Esto significa un obstáculo para el desarrollo y es uno de los motivos de la reducción gradual del rendimiento per capita nacional, de 0,3% a 1% en el período 1997-2010.[19]

Según datos del gobierno, 58% de las personas que viven con VIH/SIDA son mujeres y jóvenes y 75% de las personas infectadas entre 15 y 24 años son mujeres.[20] Aunque 44% de las mujeres y 60% de los hombres conocen por lo menos dos maneras de prevenir el VIH/SIDA, solamente 6% de las mujeres y 12% de los hombres declaran haber usado preservativo en la última relación sexual.[21]

Altos niveles de corrupción

Tras la firma en 1992 de los Acuerdos de Paz en Roma entre el partido Frente de Liberación de Mozambique (FRELIMO) y la Resistencia Nacional Mozambiqueña, que pusieron fin a una guerra que había durado casi 16 años, se vive un creciente clima de paz que favorece el crecimiento social, económico y cultural. No obstante, la gravedad de la corrupción en la administración pública y la fragilidad del sistema judicial son factores que retardan el desarrollo socioeconómico.[22]

En la provincia de Inhambane, la corrupción fue identificada como el mayor obstáculo al desarrollo económico En esta provincia, las empresas gastan un promedio de 9,5% de sus ganancias líquidas en comisiones ilegales.[23]

En 2003, el informe de competitividad en África del Foro Económico Mundial colocó a Mozambique en la posición 19 entre 21 países en materia de sobornos ilegales en importaciones e importaciones, en la posición 17 entre 21 en el soborno de altos funcionarios gubernamentales, y en la 17 entre 21 en la falta de independencia del aparato judicial.[24]

En octubre de 2003, la Asamblea de la República aprobó la Ley Anticorrupción que pretende frenar la corrupción en los gabinetes gubernamentales, la fuerza policial, los hospitales y las escuelas.

La fragilidad del sistema judicial se debe principalmente a la falta de jueces formados, ya que muchos tribunales funcionan con personal sin capacitación universitaria. Asimismo, el número de abogados defensores públicos no logra cubrir la demanda de la población.[25] El país cuenta con menos de 200 jueces. Existen dos sistemas de justicia formal complementarios: el sistema civil y penal y el sistema militar. El Supremo Tribunal de Justicia administra el sistema civil y penal y el Ministerio de Defensa Nacional los tribunales militares.[26]

Al existir una fuerte penetración en los tribunales y el aparato estatal por parte del FRELIMO, el abuso de poder y la impunidad de los infractores tornan cada vez más difícil el combate a la corrupción y la mala gobernanza.

Entre 2000 y 2004 el índice de criminalidad creció bastante. Algunos agentes de la policía y otros funcionarios públicos operan como miembros o cómplices del crimen organizado. La corrupción se extendió a todos los niveles, y la policía, mal pagada y carente de profesionalismo, utiliza la violencia y las detenciones para intimidar a las personas, impidiéndoles denunciar los abusos y extorsionando a vendedores callejeros.[27]

La crisis carcelaria

Las condiciones en las prisiones son extremadamente duras y amenazan la vida humana. Dos Direcciones Nacionales de Prisiones (DNP), una bajo la autoridad del Ministerio de Justicia y otra bajo la autoridad del Ministerio del Interior, dirigen prisiones en todas las capitales provinciales. Las DNP derivan además algunos prisioneros a una penitenciaría agrícola en Mabalane y a penitenciarías industriales en Nampula y en Maputo. La mayor parte de los prisioneros reciben apenas una comida diaria, compuesta de porotos y harina de mandioca. Se acostumbra que las familias lleven alimentos a los prisioneros, aunque algunos relatos ocasionales señalan que los guardias exigen sobornos a cambio de la autorización para la entrega de comida a los reclusos.[28]

Se verifica un gran número de muertes dentro de las prisiones, en su gran mayoría causadas por enfermedades. En 2005 algunos prisioneros murieron de presunto envenenamiento.

Las intalaciones carcelarias están extremadamente superpobladas, y generalmente albergan de dos a seis veces la capacidad máxima. En 2001, la no gubernamental Asociación Nacional de Apoyo y Protección a los Prisioneros condujo una investigación sobre las cárceles del país y verificó que, entre otras, la Prisión Central de Beira alojaba 705 reclusos en un recinto previsto para 400, en Nampula había 724 en una prisión construida para 100 y la Prisión Central de Maputo, prevista para 800 prisioneros, albergaba 2.450. En contraste, la Prisión de Máxima Seguridad de Machava, en Maputo, con una capacidad de 600, alojaba un número considerablemente inferior de reclusos. En prisiones administradas por el Ministerio de Justicia se encontraban detenidas aproximadamente 7.180 personas.[29]

Conclusión

Los Objetivos de Desarrollo del Milenio acordados en el ámbito de la ONU son una herramienta válida y esencial para promover el avance socioeconómico en un país que atraviesa tantas dificultades como Mozambique. Las necesidades son extremas en todos los sectores y su abordaje es urgente. Los ODM son objetivos primarios que sólo podrán lograrse si se instauran mecanismos que aseguren la rendición de cuentas en el aparato del Estado, especialmente el sistema judicial. Los altos niveles de corrupción en la gestión pública y privada hacen que la transparencia también sea un objetivo imperioso en la realidad mozambiqueña.

Asimismo, se espera que la condonación de la deuda a 18 países pobres, incluyendo Mozambique, anunciada en julio de 2005 por los siete países más industrializados y Rusia (G8), incentive una mayor inversión en la salud, la educación y el combate de la corrupción.

Notas:

[1] Instituto Nacional de Estatística (INE). “O Pais”, 19 de junio de 2005, www.ine.gov.mz/o_pais
[2] En 1975, el Frente de Liberación de Mozambique (FRELIMO) declaró la independencia y dos años después adoptó el marxismo-leninismo como orientación ideológica. En 1990, el gobierno inició negociaciones con la Resistencia Nacional Mozambiqueña (RENAMO), facilitadas por la constitución de ese año, que admitía un sistema multipartidista. La ONU intervino en 1992 con un Plan de Paz y en las elecciones de 1994 el candidato del partido FRELIMO y presidente desde 1986, Joaquim Chissano, obtuvo más de 53% de los votos. Chissano fue reelecto en 1999. En 2005 asumió como presidente el empresario del FRELIMO Armando Guebuza.
[3] www.zambezia.co.mz/downloads/Constituiçao2004
[4] Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD). Human Development Report 2004. Cultural liberty in today’s diverse world.
[5] PNUD, op cit.
[6] PNUD, op cit.
[7] Embajada de los Estados Unidos de América en Mozambique; Ministerio de Democracia, Derechos Humanos y Trabajo. “Informe sobre prácticas de Derechos Humanos”, febrero de 2004, www.usembassy-maputo.gov.mz/direitoshuman.htm
[8] Gobierno de Mozambique. “Plano de acção para a redução da pobreza absoluta”, 2001, www.govmoz.gov.mz/parpa
[9] Programa Quinquenal del Gobierno, 2004, www.zambeze.co.mz/documentos/programa
[10] INE. “Populaçao”, 19 de junio de 2005, www.ine.gov.mz/populacao
[11] UNICEF. "Panorama Mozambique", www.unicef.org/spanish/infobycountry/mozambique.html
[12] www.ine.gov/publicações
[13] Embajada de los Estados Unidos de América en Mozambique, op cit.
[14] Organización para el Desarrollo Comunitario. Investigación realizada en 2003 en la provincia de Manica, en los distritos de Macossa y Tambara.
[15] PNUD, op cit.
[16] Ibid.
[17] INE. www.ind.gov.mz/indpnud/; 21 de junio de 2005. En Mozambique se producen unas 700 infecciones diarias.
[18] www.stop.co.mz/news, 16 de junio de 2005
[19] Dirección Nacional de Planificación y Presupuesto; Ministerio de Planificación y Finanzas; Instituto Internacional de Investigación en Políticas Alimentarias; Universidad de Purdue. “Pobreza y bienestar en Mozambique: segunda evaluación nacional 2004”, marzo de 2004, www.sarpn.org.za/documents/d0000777/P880-Mozambique_P_042004.pdf
[20] Ministerio de Salud/INE. Impacto Demográfico do HIV/Aids em Moçambique. 2002.
[21] Ibid.
[22] “Policia e Justiça, os piores no Relatório sobre Corrupçao e Governaçao”, 3 de junio de 2005, www.stop.co.mz/news; la investigación sobre corrupción y gobernanza realizada por Austral Consultores reveló que 60,8% de los funcionarios públicos afirma que la corrupción en el sector público es grave o muy grave, 34,9% juzga como una práctica común el pago de sobornos, que 33,3% de las empresas pagaron sobornos a servicios públicos, 20% de usuarios dijeron haber pagado sobornos a servicios públicos, 12% de los entrevistados declararon haber violado las reglas de concursos públicos y 11% revelan haber desviado fondos.
[23] Mosse, Marcelo. “Corrupção em Moçambique”. 20 de julio de 2005, www.zambezia.co.mz/content/view/329/1/
[24] World Economic Forum. “African Competitiveness Report 2003”. 20 de julio de 2005, www.weforum.org/pdf/Global_Competitiveness_Reports/Reports/ACR_2003_2004...
[25] Supremo Tribunal de Justiça (STJ). “Novo presidente do STJ empossado a 7 de abril”, www.stj.pt/not_files/not02.html#08Abr2005
[26] Ibid.
[27] Mosse, Marcelo, op cit.
[28] Embajada de los Estados Unidos de América en Mozambique, op cit.
[29] Ibid.