Carestía alimentaria causa cambio en la dieta mundial

Cultivo de arroz a pequeña escala
en Ross Bethio, Senegal.
(Foto: Rebecca Blackwell/Oxfam)

Fuente: Intermón Oxfam.

Más de la mitad de los habitantes del planeta cambiaron sus hábitos alimenticios en los últimos dos años, y gran parte de ellos lo atribuye al aumento de los precios, según una encuesta internacional encargada por la red Oxfam a la firma GlobeScan y realizada en 17 países representativos de todos los continentes.

El estudio realizado en Australia, Alemania, Brasil, España, Estados Unidos, Filipinas, Ghana, Gran Bretaña, Guatemala, Holanda, India, Kenia, México, Pakistán, Rusia, Sudáfrica y Tanzania indica que 54% de los 16.000 entrevistados afirmaron no comer lo mismo que hace dos años, justo antes de que se desatara la carestía alimentaria que aún persiste. Del total de encuestados, 39% explicaron que su dieta había cambiado por el aumento de precios y 33% esgrimió razones de salud. En Kenia, 76% dijeron haber modificado su dieta, de los que 79% lo atribuyeron al precio de los alimentos.

El encarecimiento fue la mayor preocupación de 66% de los encuestados en lo que se refiere a los alimentos, mientras que para 43% fue que la comida sea nutritiva y saludable. Sin embargo, en los países más pobres la mayor preocupación es el acceso a los alimentos: ésa fue la respuesta del 57% de los consultados en Kenia y del 45% de los de Tanzania, por ejemplo.

La mitad de kis entrevistados en países en desarrollo como Kenia y Tanzania afirmaron carecer de ingresos suficientes para comer a diario, proporción que se reduce a sólo 6% en países desarrollados como Alemania, Australia, Estados Unidos y Gran Bretaña, y a apenas 5% en el caso de España

La mayoría de los encuestados atribuyeron la carestía al encarecimiento del petróleo y del transporte y al impacto del cambio climático. Les siguen en orden descendente las políticas gubernamentales y la acción de las multinacionales. España y Alemania son los países donde se asignó más importancia al papel del sector privado: 27% de los entrevistados allí consideraron a las empresas alimentarias el principal factor de la cadena alimentaria.

"Lo que comemos está cambiando rápidamente y para demasiadas personas está cambiando para peor", dijo Ariane Arpa, directora general de Intermón Oxfam, filial de Oxfam en España. "Una gran cantidad de personas, especialmente en los países más pobres del mundo, están reduciendo la cantidad o la calidad de los alimentos que consumen por el aumento del precio. Los líderes mundiales, especialmente los del G20, deben actuar ahora para arreglar el sistema alimentario, que no funciona. Deben regular los mercados de materias primas, deben reformar las políticas de biocombustibles para mantener los precios de los alimentos bajo control y deben invertir en los pequeños productores en los países más pobres y ayudarlos a adaptarse al clima cambiante.”

La encuesta realizada por GlobeScan también revela hasta qué punto la comida occidental se ha extendido por todo el mundo. La pizza, la pasta y el pollo encabezan la lista de los alimentos favoritos en la mayoría de los países, junto con platos nacionales como la paella en España y el biryani en la India. Las únicas excepciones son las naciones más pobres de África, donde siguen dominando los platos tradicionales a base de maíz. 

Las 10 comidas favoritas a escala global son la pasta (9%), la carne (6%), el arroz (5%), la pizza (5%), el pollo (5%), el pescado y los mariscos (4%), las verduras (3%), la comida china (2%), la italiana (2%) y la mexicana (2%).

Olivier Martin, director de investigaciones de GlobeScan, afirmó: “Las consecuencias de la subida del precio de los alimentos en todo el mundo son muy evidentes en los resultados de la encuesta. El precio de los alimentos es la preocupación principal que la gente tiene sobre lo que ellos y sus familias comen.”

Resultados de la encuesta: http://bit.ly/or0Zr3