Sociedad civil y países en desarrollo defienden a la UNCTAD

Una reunión en el Foro de la
Sociedad Civil: Yao Graham
(TWN Africa), Amel Affouz
(UNCTAD), Hamish Jenkins (ONU)
y Mohammed Abdulla Al-Maadeed
(NHRC). (Foto: UNCTAD)

El Grupo de los 77 y China, junto con organizaciones de la sociedad civil, han salido en defensa de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD), amenazada por países del Norte industrial que pretenden diluir su mandato y reducir su capacidad para asesorar a los estados del Sur.

El Foro de la Sociedad Civil de la XIII UNCTAD, que comenzó este miércoles en Doha, Qatar, ha cuestionado las prácticas habituales en materia de comercio, inversiones, finanzas y cooperación. Representantes de diversas organizaciones observan que la actual crisis demostró la importancia del papel del Estado en el desarrollo económico, y que su fortalecimiento no debe ser una respuesta temporaria a este tipo de dificultades.

En una sesión interactiva que contó con la participación del secretario general de la UNCTAD, Supachai Panitchpakdi, Kinda Mohamadieh, de la Red de ONG Árabes para el Desarrollo (ANND), rechazó las amenazas de los países industrializados contra la agencia y destacó su relevancia. 

Supachai enfatizó que la crisis mundial demostró que el enfoque habitual, que confía en la mera desregulación de los mercados, es incapaz de avanzar hacia un desarrollo equitativo e inclusivo. “Debemos equilibrar el rol del Estado y el del mercado”, dijo, y también expresó su pesar por los esfuerzos para silenciar a la UNCTAD en cuestiones cruciales.

En el Foro de la Sociedad Civil han abundado las manifestaciones de preocupación porque representantes de economías industriales (en especial los de Australia, Canadá, Corea del Sur, Estados Unidos, Japón, Noruega, Nueva Zelanda, Suiza, y los de la Unión Europea) muestran tal inflexibilidad que la XIII UNCTAD podría concluir el jueves 26 sin una declaración final, un extremo que no tiene precedentes la historia de esta organización fundada en 1964.

El Grupo de los 77 (expresión de más de 130 países en desarrollo en la Organización de las Naciones Unidas) y China reiteraron su oposición a las demandas de los estados ricos. Por otra parte, más de 50 ex altos funcionarios de la UNCTAD, incluido un ex secretario general, señalaron en una declaración que esos países decidieron “matar al mensajero” porque “no pueden matar al mensaje”.

En la sociedad civil son frecuentes los llamados a ampliar el espacio con que cuentan los países en desarrollo para implementar con autonomía sus políticas, encorsetado por acuerdos de libre comercio y de inversión, y por condiciones impuestas por donantes y por instituciones financieras internacionales.

Mientras, las negociaciones formales entre delegados gubernamentales en la XIII UNCTAD parecen bloqueadas, dada la negativa de los países industrializados a discutir asuntos clave de las naciones en desarrollo.

La UNCTAD fue creada para producir análisis y asesorar a gobiernos en cuestiones vinculadas con el desarrollo, como el comercio, las finanzas y la tecnología, entre otras. La Conferencia anterior, realizada en Accra, concluyó con un acuerdo por el que se ampliaron las potestades de la organización.

A lo largo de los años, los análisis producidos por la UNCTAD señalaron los peligros de la liberalización de los mercados y de las finanzas, a la cual atribuyen la actual crisis económica.

Los países industriales se rehúsan incluso a renovar el mandato acordado para la UNCTAD en Accra, como reclaman las organizaciones de la sociedad civil, en especial para continuar con sus investigaciones sobre la crisis y los desafíos que la globalización supone para el desarrollo. Esos trabajos han servido como contrapeso a los argumentos de las naciones ricas en negociaciones sobre comercio, finanzas y otros asuntos económicos.

Fuente: Foro de la Sociedad Civil de la XIII UNCTAD