Iraq

El nuevo gobierno de Irak, anunciado el 8 de setiembre por el primer ministro, Haider al Abadi, solo incluye una mujer entre sus 25 miembros (22 ministros y tres viceministros). Esto resintió a las principales organizaciones de mujeres del país. La Red de Mujeres de Irak (IWN, por su sigla en inglés) espera que haya más mujeres en cargos de toma de decisiones, según lo prometido por los dirigentes políticos. "Es lamentable que las mujeres continúan siendo víctimas de negociados patriarcales en la distribución de los cargos ministeriales y en la consolidación de la política de exclusión y discriminación contra la mujer".

Las activistas acordaron continuar exigiendo que se aumente el porcentaje de mujeres dentro del gabinete, entre los ministros y viceministros que todavía no han sido nombrados, y en las presidencias de las comisiones parlamentarias y de las comisiones y juntas independientes.

Iraqi Al-Amal Association, miembro de Social Watch en Irak, está de luto, lamenta con profundo pesar y angustia, el asesinato de uno de sus activistas, Saad Abdul Wahab Ahmed.
Terroristas desconocidos asesinaron a nuestro colega Saad, con pistolas con silenciador en Muqdadiyah, Diyala Provence el pasado lunes 18 de agosto. Hacemos llegar nuestras más profundas condolencias a su familia, amigos y colegas.

Terroristas desconocidos asesinaron a nuestro colega Saad, con pistolas con silenciador en Muqdadiyah, Diyala Provence el pasado lunes 18 de agosto. Hacemos llegar nuestras más profundas condolencias a su familia, amigos y colegas.

Mujer en Al-Anbar, Iraq. Foto:
UNHCR Iraq

Casi once años han pasado desde que los EE.UU. derrocó el régimen de Saddam Hussein e Irak aún continúa luchando. En diciembre de 2013, las fuerzas de seguridad nacional de Irak irrumpieron en la residencia privada del ministro de Finanzas iraquí, arrestando a varios de sus colaboradores por apoyar al terrorismo. Este incidente sirvió como detonante de la violencia sectaria en todo el triángulo suní en el sur de Irak – en la provincia de Al-Anbar. Esta fue una de las áreas en la que se realizaron manifestaciones pacíficas en febrero de 2011, pero posteriormente fue testigo de la mayor cantidad de violencia sectaria, incluidos ataques de las fuerzas de seguridad del gobierno contra la población civil.

El reciente avance del Estado Islámico de Irak y Siria (ISIS o Daesh) fuerzas en Mosul y otras áreas en Irak ha causado gran preocupación por las perspectivas de paz.

Hanaa Edwar,  secretaria general de  la Asociación Al- Amal de Irak, miembro iraquí de Social Watch, ha sido nombrada "Arab Woman of the Year 2013" (Mujer árabe del 2013) por Takreem por su coraje y éxitos en su duro trabajo en las áreas de la sociedad civil y los derechos humanos por la igualdad, los derechos y el empoderamiento de las mujeres para que participen en la sociedad y en la vida política.

En su discurso en la ceremonia de premiación, Hanaa Edwar expresó su agradecimiento y profunda gratitud por el reconocimiento, e hizo hincapié en su mayor responsabilidad más allá de las fronteras de su tierra natal. También agradeció a sus colegas de la Asociación Al- Amal iraquí y de muchas otras organizaciones de la sociedad civil por el apoyo y la asistencia que recibió durante su trabajo que, en conjunto, sembró las semillas de la esperanza en Irak.

Viuda iraquí con sus hijos.
(Foto: CODEPINK Women
For Peace/Flickr/CC)

Las disputas políticas y la inseguridad impiden que Iraq alcance la estabilidad necesaria para su desarrollo, según el aporte de la Asociación Al Amal al Informe de Social Watch 2013. Para transitar por el camino correcto, el gobierno debe implementar el censo postergado desde 2007, con el fin de recopilar información confiable para el diseño de planes integrales de desarrollo, eficaces y adecuadamente financiados.

During the last 10 years, Iraq has undergone dramatic changes of rulers, but the much-expected transition to democracy failed to pave the way for development. Although the government issued in 2009 a strategy for poverty reduction, the efforts, resources and following-up have not been enough to see noticeable results on the ground.
After decades of war, neglect and mismanagement, the country’s social and environmental situation is critical. Tras décadas de guerra, negligencia y mala administración, la situación social y medioambiental del país es crítica. Irak continúa lidiando con un gobierno inestable, con la corrupción y con enormes abusos a los derechos humanos que incluyen ataques contra los grupos minoritarios. Hasta que no se obtengan niveles más altos de paz y seguridad, será difícil el progreso en términos de la creación y utilización de un modelo exitoso de desarrollo sustentable. En tanto el país vive un incremento en la participación de la sociedad civil y en la participación democrática, a los efectos de garantizar un futuro democrático lo que se exige es una constante atención a la represión y las violaciones de los derechos humanos.
Hanaa Edwar en Estocolmo
(Foto: Hanna Navier/Kvinna till Kvinna)br>

Fuentes: Buró Internacional para la Paz, en inglésFundación Kvinna till Kvinna, en inglesIPS

Hanaa Edwar recibirá el 29 de octubre en Potsdam, Alemania, el Premio Sean MacBride de la Paz 2011, pero nada la motiva a bajar los brazos. “Debo seguir por el pueblo iraquí. Continuamos luchando por la paz, la equidad y la democracia”, dijo Edwar, cofundadora y actual secretaria general de la Asociación Al-Amal (punto focal de Social Watch en ese país), entrevistada pocas semanas atrás para el sitio web de la fundación feminista sueca Kvinna till Kvinna.

La frágil situación política y el débil estado de derecho han transformado la sociedad iraquí en un ambiente inseguro para el desarrollo y la estabilidad. Las mujeres iraquíes enfrentan condiciones difíciles, cargan con más responsabilidades y tienen numerosos desafíos. A diario mujeres y niñas son víctimas de matrimonios forzados y asesinatos por motivos de “honor”, se las coacciona hasta que cometen suicidio, padecen violencia física y sexual, son objeto de explotación sexual y se limita su autonomía y su movilidad. Es necesario no sólo promover la rehabilitación social del país sino también impulsar y apoyar las nuevas estructuras institucionales, la legislación y su aplicación para proteger los derechos políticos, económicos, sociales y culturales de la mujer.
Syndicate content