China es uno de los 23 países para los cuales el ICB 2008 no suministra información sobre dirección o ritmo evolutivo. Es también el país que, de acuerdo a las estimaciones de pobreza según ingreso, avanza tan rápido que compensa el resto de los promedios mundiales. En rigor, la tendencia de la pobreza en China es difícil de determinar ya que, en la actualidad, sólo disponemos, como resultado de una investigación confiable, de las cifras de pobreza según ingresos para 2005, siendo estimaciones todos los valores anteriores. Más aún, una de las debilidades conceptuales de las estimaciones de pobreza según los ingresos es que, en la transición hacia una economía de mercado, los ingresos pueden aumentar sin que cambie la forma de vida de las personas. Tomemos el caso del sistema comunitario, en el que millones de campesinos eran autosuficientes. Ahora reciben un salario y tienen ingresos pero deben, también, pagar por los alimentos que antes recibían gratis. El ingreso total registrado aumenta tanto con el dinero que reciben como con lo que pagan. ¿Debería Social Watch realizar intentos similares para estimar la evolución reciente del ICB de China? Consideramos que no. Por un lado, la confiabilidad de nuestro índice se basa en que los datos se pueden verificar contra datos publicados por fuentes internacionales confiables. Por otro, el índice debe usarse para deducir una tendencia y no al revés. Es fácil asumir que el reciente crecimiento económico de China se haya visto acompañado por una mejora similar de las estadísticas educativas y de salud. Sin embargo, desde una perspectiva histórica también hay, también, evidencia de lo contrario: el espectacular crecimiento económico de China parece haber comenzado DESPUÉS de haberse logrado la mejora básica de la salud y la educación para todos. Deberemos esperar por estadísticas confiables para estar en condiciones de establecer con certeza cuál es la tendencia reciente para China. |