Uganda: La corrupción frustra el logro de los ODM

Carteles anticorrupción en Uganda
(Foto: futureatlas.com)

Aunque el gobierno de Uganda ha asignado recursos continuamente para alcanzar los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM), los fracasos en la lucha contra la corrupción enlentecen los progresos, escribió David Obot,  investigador del Development Network of Indigenous Voluntary Associations (DENIVA) y autor de la contribución nacional al Informe Social Watch 2013. Para 2015, Uganda podría lograr tres de los ocho ODM. Los otros cinco no se cumplirán, en particular los relacionados con los sectores donde la corrupción es muy fuerte.

Uganda obtuvo fondos para apoyar los programas nacionales de desarrollo gracias al crecimiento económico sostenido, en un promedio de 6,9 por ciento anual en la década de 1990 y de 7,2 por ciento en la década de 2000. Las iniciativas de alivio de la deuda permitieron al gobierno liberar más recursos para estos programas. Este país de África oriental abordó con éxito algunos desafíos señalados en los ODM, como la pobreza, el hambre, las brechas de género en la educación y el acceso al agua potable, al saneamiento básico y al tratamiento del VIH / SIDA, señaló Obot.

Por otra parte, las estadísticas muestran progresos lentos en los ODM relacionados con la salud infantil, materna y reproductiva, la lucha contra el paludismo y otras enfermedades graves, y la pérdida de recursos ambientales y la biodiversidad.

La corrupción en Uganda ha alcanzado dimensiones sin precedentes, cortando una porción significativa del presupuesto nacional y, por lo tanto, reduciendo los fondos asignados a los planes de desarrollo. En 2005, el Banco Mundial estimó las pérdidas por corrupción en USD 204 millones, mientras que el Informe Global Integrity duplicó la cifra en alrededor de USD 400 millones. El Índice de Corrupción de África Oriental emitido por Transparency International en agosto de 2012 clasificó a Uganda en el primer lugar entre los cinco países de la región: el 40,7% de los encuestados dijeron haber sido testigos de pagos indebidos en el sector público.

Algunos casos han dado lugar a la interdicción de altos funcionarios ejecutivos. Sin embargo, la eficacia de la lucha contra la corrupción ha sido mínima. Los fracasos se atribuyen a la mala investigación, la sobrecarga de trabajo en la policía y en el sistema judicial y la falta de voluntad política para tomar acciones sobre"personalidades bien conectadas".

La corrupción es también la razón por la cual los gobiernos de Dinamarca, Irlanda, Países Bajos, Noruega, Suecia y Reino Unido suspendieron en noviembre de 2012 su ayuda a Uganda. Esto sucedió cuando salieron a la luz transferencias a las cuentas bancarias pertenecientes a los empleados de la Oficina del Primer Ministro por USD 25,7 millones de fondos de los donantes destinados a la recuperación después de los conflictos del norte del país. Los países de Europa condicionaron la reanudación de la ayuda a la investigación exhaustiva del caso, el enjuiciamiento de los malversadores, la recuperación del dinero malversado y el establecimiento de sistemas de control eficaces.

De acuerdo con el informe sobre la Pobreza en Uganda (2012), la población que vive por debajo del umbral de pobreza se redujo de 56,4 a 24,5 por ciento entre 1992 y 2009/2010. El país había superado la meta de los ODM de 35,7 por ciento en 2005. La tasa de escolarización en la enseñanza primaria aumentó entre 2001 y 2010 de 87% a 96% de los niños de 6 a 12 años. Además, hay cada vez más mujeres que se dedican a la actividad política y que ocupan escaños en el Parlamento y en los consejos locales.

La Encuesta Demográfica de Hogares de Uganda informó que entre 1995 y 2011 la tasa de mortalidad de menores de cinco años disminuyó de 156 a 90 porcada 1.000 nacidos vivos, la tasa de mortalidad infantil se redujo de 81 a 54 por 1.000 nacidos vivos, la tasa de mortalidad materna disminuyó de 506 a 352 por cada 100.000 nacimientos y la proporción de partos atendidos por personal de salud calificado aumentó de 38% a 59%, en tanto el uso de anticonceptivos aumentó de 15% a 30%.

Mientras tanto, la prevalencia del VIH aumentó de 6,5% a 7,1%. En 2010, la Organización Mundial de la Salud (OMS) en su Informe mundial sobre la tuberculosis clasifica a Uganda en el puesto 16 entre los 22 países con alta carga de tuberculosis. La tuberculosis sigue siendo un problema importante de salud pública, con una incidencia anual de 330 casos cada 100.000 habitantes y un estimado de 102.000 nuevas infecciones por año.

Para empeorar las cosas, las compañías farmacéuticas ponen freno a la cooperación destinada a dar acceso a la población ugandesa a medicamentos esenciales a un precio asequible.

Además, en 2010 la Autoridad Nacional de Gestión Ambiental (NEMA) señaló que la degradación del medioambiente había empeorado, aumentando la carga para la economía nacional y más recursos deben asignarse para contener los brotes de enfermedades, el tratamiento de agua potable, asentar refugiados ambientales y restaurar los ecosistemas dañados. También observó una disminución en el porcentaje de territorio cubierto por bosques, de 21,3% en 1990 a 18,3% en 2005.

Fuente
Informe de la coalición de Social Watch en Uganda (en inglés): http://www.socialwatch.org/node/15669