Persiste el gran déficit en seguro social

Cuatro de cada cinco personas no participan de sistema de previsión en salud alguno y existe una baja calidad de servicios públicos, según el informe 2007 de Social Watch presentado ayer.El informe, capítulo Paraguay, denuncia un alto nivel de exclusión en el sistema de previsión social en salud señalando que el mismo se debe a que el mismo está orientado a trabajadores asalariados dependientes, a la evasión del régimen obligatorio y a inequidades determinadas por el nivel de ingreso.

El informe, elaborado por Edgar Giménez Caballero y César Cabral Mereles, indica también que sólo tres de cada diez adultos mayores disfruta de una jubilación.

Clama por una profunda reestructuración del sistema de seguridad social, urgiendo la aplicación de “una serie de medidas a mediano plazo” señalando que el mismo “requiere de un amplio pacto entre toda la ciudadanía”.

El informe señala que sólo una de cada cinco personas posee algún tipo de seguro médico, lo que significa que el 78,5% de la población no tiene seguro alguno. Tampoco cuenta con ningún seguro de salud el 91% de la población rural y 98% de la población más pobre.

Según el documento, las cifras de desprotección se han mantenido elevadas históricamente, con un discreto incremento de la cobertura de IPS de 10,9 a 12,5% entre 2000 y 2005, según datos de la Dirección General de Estadística, Encuestas y Censos (DGEEC).

En consecuencia, señala el informe, 1.400.000 personas no tienen la posibilidad de cotizar el seguro público de salud, pues son trabajadoras por cuenta propia, familiares no remunerados, patrones, campesinos en indígenas.

BAJA CALIDAD DE LOS SERVICIOS

El informe señala que en términos de calidad percibida, los reportes de la prensa local y las quejas de los usuarios sugieren que los servicios del sector público son de menor calidad que los destinados a sectores de mayor poder adquisitivo. Sostiene que “para mejorar la calidad organizativa, el IPS ha implementado una serie de medidas que incluyen el fortalecimiento de clínicas periféricas, un sistema informático de gestión con registro único a través de cédula de identidad y un novedoso sistema de agenda de consultas por vía telefónica. Según esta iniciativa iniciada en 2004 y que se consolidó en 2006, aún no se ha valorado el impacto real de estas innovaciones en los procesos y resultados.

BAJA COBERTURA

El documento señala que solo tres de cada diez adultos mayores están acogidos al beneficio de la jubilación y que en el 2005 el número de jubilados y pensionados apenas alcanzaba 93.000 personas. Los cotizantes de este sistema segmentado representan apenas el 22% de la población económicamente activa.

El informe de Giménez y Cabral sostiene que el determinante fundamental de la exclusión es el modelo orientado exclusivamente a los trabajadores asalariados, que deja fuera de posibilidad de cotizar al 60% de la población económicamente activa.

Afirma que en los tres últimos años, iniciativas gerenciales y legales desde el IPS han propuesto ampliar su cobertura tanto para reducir la evasión del régimen obligatorio en el sector privado como para incorporar a segmentos de la población; sin embargo, estas iniciativas no fueron aprobadas y, en algunos casos, ni siquiera tratadas.