Re-ingeniería del desarrollo: el foro sobre políticas de la sociedad civil comienza en las reuniones anuales del Banco Mundial

Author: 
Ana Abelenda

Martes 6 de octubre (Washington DC)
La necesidad de construir un nuevo paradigma de desarrollo con medidas alternativas que puedan proporcionar políticas de desarrollo basadas en la evidencia empírica fue objeto de debates en el comienzo del Foro de Políticas de la Sociedad Civil del Banco Mundial y de las reuniones anuales del FMI que tuvieron lugar aquí en Washington DC el 6 de octubre de 2010. ¿Existe una tendencia al cambio en la manera en que los gobiernos diseñan las políticas de desarrollo para el progreso social?

El grupo de expertos de alto nivel "Hacia un nuevo paradigma de desarrollo - Repensar los conceptos y las medidas para el  desarrollo y el progreso social", organizado por la Fundación Friedrich-Ebert-Stiftung reunió a investigadores, funcionarios de la ONU y representantes de la sociedad civil para presentar y debatir las medidas alternativas y los modelos de desarrollo y bienestar necesarios para alcanzar el progreso social y económico. El Banco Mundial ha recibido numerosas críticas por su forma de reducir la medición de la pobreza al ingreso ya que no ésta no es capaz de reflejar un abordaje desde los derechos humanos.

El Índice de Pobreza Multidimensional (MPI, por sus siglas en inglés), creado por la Iniciativa Oxford para la Pobreza y el Desarrollo Humano (OPHI, por sus siglas en inglés) y el PNUD, analiza la naturaleza e intensidad de la pobreza a nivel individual en educación, en parámetros sanitarios y según el nivel de vida. El nuevo índice se incluirá en la próxima edición del Informe sobre Desarrollo Humano del PNUD y complementa la medición en base a ingresos monetarios ya que refleja una serie de privaciones que afectan la vida de una persona al mismo tiempo. Sabina Alkire, Directora de OPHI, afirmó que México ha sidio el primer país en utilizar el índice a nivel gubernamental, y otros países como Chile y Colombia, también lo están utilizando.

Un nuevo indicador del progreso en los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM) también fue presentado por Benjamín León, investigador invitado en el Centro para el Desarrollo Global (CGD, por sus siglas en inglés). El nuevo índice de progreso de los ODM compara el desempeño del país con los objetivos básicos de los ODM sobre la pobreza, el hambre, la igualdad de género, la educación, la mortalidad infantil, la salud y el agua. El índice mostró logros sorprendentes de países pobres como Honduras, que contradicen de la creencia de que los países de bajos ingresos se están quedando atrás. "Para el año 2015 probablemente no sabremos si muchos países habrán alcanzado los ODM porque no existen datos de los países sobre un gran número de objetivos", dijo León. Más sobre este índice en: http://www.cgdev.org/content/publications/detail/1424377

"En el actual modelo de desarrollo los países pobres están, de hecho, financiando el consumo en los países ricos debido a que la explosión de los flujos financieros no se traduce en una mejor inversión", dijo Manuel Montes, jefe de políticas de desarrollo en el Departamento de las Naciones Unidas para Asuntos Económicos y Sociales (UNDESA, por sus siglas en inglés). Los elementos clave del nuevo paradigma de desarrollo de acuerdo a Montes deben ser: un crecimiento económico más estable, la promoción de transformaciones estructurales tales como políticas activas para el mercado laboral, la inversión pública y la política industrial y, por último, un fortalecimiento del Estado que ponga en vigor la capacidad del Estado para la formulación de políticas. "La controversia relativa a los ODM es que constituyen un enfoque de desarrollo desprovisto de estrategia y esto es un problema, ya que legitima las políticas orientadas al mercado que sólo ayudan a los damnificados", sentenció.

Representantes de la sociedad civil en el público dieron la bienvenida a la utilización de los indicadores alternativos para monitorear el progreso social y expresaron su especial preocupación por el hecho de que no existe suficiente monitoreo del compromiso de los países desarrollados en relación al objetivo 8 (financiación para el desarrollo), un aspecto clave para el logro de los ODM.

La red Social Watch también ha contribuido a la utilización de indicadores alternativos para medir el progreso social mediante el desarrollo de su Índice de Capacidades Básicas (ICB), un promedio de tres indicadores básicos: mortalidad infantil, salud materna y educación. El ICB de 2010 muestra que la reducción de la pobreza en los últimos veinte años, de hecho,  se ha desacelerado, lo que indica que los esfuerzos de la comunidad internacional no se han traducido en una mejora más rápida de la vida de las personas. (Ver más)