Llegó la hora del Impuesto a las Transferencias Financieras

Robin Hood, emblema de la
campaña por el ITF.

La idea de gravar las transacciones financieras internacionales está ganando fuerza. La UE promueve su instauración a nivel internacional, y analiza imponerlo para 2014 en todo el bloque o al menos en la zona del euro.

Pero aún está por verse el alcance del impuesto y el destino de lo recaudado, el cual se debate entre mitigar los efectos de la crisis en el Norte industrializado o, como se proponía originalmente, apoyar el desarrollo de los países del Sur y combatir la pobreza.

Las iniciativas hacia un ITF resurgen hoy, 40 años después de que el economista estadounidense James Tobin postulara gravar con una pequeñísima tasa las transacciones de divisas con el objetivo de estabilizar los tipos de cambio, y un decenio y medio después de que organizaciones de la sociedad civil recogieran la idea con variantes, como la de usar ese dinero para erradicar la pobreza en todo el mundo.

Entre las manifestaciones de apoyo más recientes figuran las surgidas en la reunión conjunta del Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional (FMI), que sesionó del 23 al 25 de septiembre en Washington. En esa oportunidad, se pronunciaron a favor de la creación del impuesto y de utilizarlo para fomentar el desarrollo la Organización Mundial de la Francofonía (integrada por 49 países que representan a uno de cada diez habitantes del mundo) y numerosos países en desarrollo de todos los continentes, mientras Alemania, Francia y otros miembros de la UE reiteraban su apoyo.

Pero los títulos en la prensa los acaparó el empresario Bill Gates, quien dejó filtrar durante la reunión en Washington un adelanto del informe que le solicitó el presidente francés Nicolás Sarkozy en nombre del Grupo de los 20 (G20) sobre financiamiento de la lucha contra la pobreza y el cambio climático. En los borradores, el magnate se pronunció en favor del ITF, el cual, en el cálculo de expertos de la Fundación Gates, recaudaría 48.000 millones de dólares en los países del G20 si gravara las transacciones con acciones de empresas con 0,01% y los de bonos de los Estados con 0,02%. Si se impusiera sólo en las principales economías europeas la recaudación sería de nueve mil millones. El estudio también propone gravar las ventas de tabaco y de combustible de barcos y aviones.

El miércoles se conoció la propuesta de la Comisión Europea, que gravaría desde 2014 las transacciones ya sea de compradores como de vendedores residentes en el bloque, excluiría las operaciones con divisas y ascendería a 0,1% del monto de las operaciones con acciones y bonos y 0,01% de las de derivados.

La intención, según el borrador de la iniciativa, es que las instituciones financieras aporten una “contribución justa para cubrir los costos de la crisis”, desalentar “transacciones riesgosas y complementar medidas regulatorias para evitar futuras crisis” e “impedir la fragmentación del mercado interno para servicios financieros”. La recaudación se repartiría entre organismos nacionales y comunitarios, de modo de reducir el actual aporte de los gobiernos al bloque.

El año pasado, el Parlamento Europeo le había pedido a la Comisión que considerara la posibilidad de financiar con este tipo de impuestos “la adaptación de los países en desarrollo al cambio climático y la mitigación” de sus efectos, así como “la cooperación al desarrollo”. Pero la propuesta del miércoles prevé esa eventualidad en el caso de que el G20 acuerde este tipo de impuesto a nivel internacional.

“El apoyo de Brasil, Sudáfrica y otros países en desarrollo será clave para salvar a los europeos de la vergüenza de gastar todo ese dinero en ellos mismos”, consideró el experto de Oxfam UK Max Lawson en el blog de esa organización británica.

Mientras, Gran Bretaña y Suecia se muestran reticentes a apoyar la iniciativa a nivel de la UE (lo cual reduciría su alcance a la zona del euro), al tiempo que la oposición de Estados Unidos es el principal obstáculo para acordar el impuesto a nivel planetario.

Francia, que actualmente preside el G20, llevará el asunto a la cumbre del grupo en Cannes en noviembre, apoyada en el informe de Bill Gates y tal como resolvieron Sarkozy y la canciller (jefa de gobierno) alemana Angela Merkel en agosto.

A comienzos de septiembre, la conferencia conjunta ONU-ONG exhortó en Bonn a establecer un ITF “para ayudar a construir sistemas de protección social en los países más vulnerables (…) y contribuir a la adaptación al cambio climático, fortalecer la sociedad civil de todo el mundo y apoyar economías más sustentables y equitativas”.

También este mes se conoció el resultado de una encuesta de Eurobarómetro, según la cual 61 por ciento de los entrevistados en Europa están a favor de un ITF a nivel internacional, apoyo que en Gran Bretaña se eleva a 65 por ciento.

En abril, un millar de economistas de renombre mundial, todos ellos al menos con un doctorado, habían apoyado la creación de un ITF para financiar la lucha contra la pobreza.

Este impuesto es una vieja aspiración de organizaciones de la sociedad civil de todo el planeta, consolidada como propuesta con la creación de redes internacionales como la Red de Justicia Fiscal (TJN, por sus siglas en inglés) y la Asociación por una Tasa sobre las Transacciones Especulativas para la Ayuda a los Ciudadanos (ATTAC), así como la Campaña Robin Hood.

El impuesto operaría, según sus impulsores, como mecanismo para desalentar la especulación financiera y crear un fondo mundial de recursos para erradicar la pobreza.

La aglomeración de apoyos llevó en septiembre a la Campaña Robin Hood a congratularse. “Nunca estuvimos tan cerca”, dijeron sus responsables. Habrá que ver si el camino se empina en los próximos meses, o años.

Más información
Sociedad civil reclama ITF: http://bit.ly/oR6mIF
Ha llegado el momento del ITF: http://bit.ly/oPdkYU
La revolución de los millonarios: http://bit.ly/oTAZQb
Un paso adelante: http://bit.ly/p6dh2w

Esta información se basa sobre datos de las siguientes fuentes
Bretton Woods Project: http://bit.ly/6g47Ve
EEPA: http://bit.ly/qzpeN2
Touch Stone (blog de los sindicatos británicos): http://bit.ly/pJZ6Ri
Oxfam Blogs: http://bit.ly/d7CuXI