Algunos puntos de vista de la sociedad civil sobre la rendición de cuentas

Como las negociaciones de la ONU sobre la Agenda post 2015 comienzan a abordar las complejas cuestiones de la rendición de cuentas, revisión y seguimiento, la diversidad de opiniones, perspectivas y la falta de propuestas concretas hacen que la probabilidad de encontrar un acuerdo sean de hecho lejanas.

Para "romper el hielo" en el tema, vamos a usar la categorización de revisión, rendición de cuentas y seguimiento de Stefano Prato , que es particularmente útil.

Revisión significa el seguimiento del progreso hacia los objetivos acordados, no solo a través de la recolección de datos, sino también a través de procesos participativos de abajo hacia arriba que involucren a las comunidades locales y los grupos vulnerables.

Rendición de cuentas significa el seguimiento de los compromisos políticos, lo que requiere un foro político especializado de alto nivel.

Seguimiento no implica ni el seguimiento del progreso, ni de los compromisos, sino la forma de ir mucho más allá, mirando al futuro y el aumento de las ambiciones en la medida que se progresa.

Prato también hace hincapié en la importancia de mantener separados la revisión, la rendición de cuentas y los procesos de seguimiento para que puedan alcanzar sus objetivos específicos.

Hace una referencia explícita a los procesos de Financiación para el Desarrollo (FpD) y reitera la importancia de mantener un proceso de seguimiento independiente para asegurar que la ambiciosa "agenda sistémica" de FpD se mantenga viva, además de los elementos de la Conferencia que se fusionarán con los Medios de Implementaciones (MOI, por su sigla en inglés) de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).

Otro punto de vista interesante viene de Marianne Beisheim , quien señala el riesgo (ya casi una realidad) de que la rendición de cuentas pueda quedar fuera del documento final de revisión de post-2015, lo que debilitaría drásticamente cualquier mecanismo de rendición de cuentas.

En su opinión, la rendición de cuentas es de suma importancia para la agenda post 2015. Sin embargo, la rendición de cuentas debe comenzar con la participación de los ciudadanos y las organizaciones de la sociedad civil en la redacción de cómo los gobiernos nacionales traducen los objetivos globales y metas en objetivos nacionales y locales. Más aún, los ciudadanos y las organizaciones de la sociedad civil también deben participar en el proceso de seguimiento y en la formulación de las recomendaciones políticas para abordar la identificación de deficiencias y retos. La participación de la sociedad civil requiere el acceso a los datos y a los planes nacionales, y la participación significativa debe ser permanente, no limitada a eventos de un día.

A pesar de que la discusión está en sus primeras etapas, están surgiendo algunos principios útiles, criterios y recomendaciones:

La importancia de los procesos inclusivos y participativos: a pesar de la retórica sobre la revolución de datos, es importante asegurar un mecanismo que pueda ir "más allá de" grandes datos, que permita la desagregación y de procesos participativos e inclusivos con los actores locales y nacionales. La participación es clave para mejorar la calidad de los datos y las interrelaciones entre los objetivos y los tres pilares del desarrollo sostenible.

La importancia de construir sobre los mecanismos existentes: por un lado hay un consenso sobre el rol de liderazgo que el Foro Político de Alto Nivel (FPAN) jugará en la revisión y rendición de cuentas de la agenda post 2015. Sin embargo, como aún no hay ninguna propuesta de cómo el FPAN va a realizar sus tareas de revisión y seguimiento dentro de un reformado ECOSOC, es muy importante evaluar las mejores prácticas de otros mecanismos de revisión de pares existentes, como los de la OCDE / DAC, la Unión Africana en el marco de la Nueva Alianza para el Desarrollo de África (NEPAD) y el Examen Periódico Universal de las Naciones Unidas (EPU) del Consejo de Derechos Humanos, por nombrar algunos.

La combinación de universalidad con la diferenciación: uno de los mayores desafíos de la revisión y de los mecanismos de rendición de cuentas es la forma de salvaguardar la universalidad de la agenda y equilibrar la necesidad de que los Estados miembros puedan definir y trabajar hacia el logro de metas nacionales competentes, ambiciosas, pero realistas y sostenibles.

Contrarrestar adecuadamente la naturaleza voluntaria del proceso dirigido por el Estado. Como la única visión consensual expresada por los gobiernos está en la naturaleza voluntaria y dirigida por el Estado de la revisión y de los mecanismos de rendición de cuentas, se hace evidente que su futura credibilidad y eficacia dependerá del grado de inclusividad, transparencia y participación que se permitirá.

Los Estados miembros tienen unos pocos meses para encontrar un terreno común sobre el tema de la revisión, seguimiento y rendición de cuentas de forma más amplia. Esto tiene que ocurrir antes de que los Jefes de Estado se reúnan en setiembre para la Cumbre Post 2015/SDG.

Al negociar las propuestas actuales y futuras, les insto a recordar lo que dijo muy elocuentemente Luisa Emilia Reyes Zúñiga durante una presentación en un panel : la rendición de cuentas es un medio y un fin en sí mismo.

Notas:

1) Managing Director, SID (Society for International Development).
2) Senior Associate SWP’s (German Institute for International and Security Affairs).
3) Coordinator, Area of Gender Policies and Budgets, Equidad de Género, Mexico
4) Accountability for the post 2015 and Financing for Development Agendas, panel discussion organized by UN-NGLS, SID, Women’s Major Group and CSO Partnership for Development Effectiveness.

Por Marina Ponti, Social Watch
@pontimari