Filipinas: El PPP olvidado

Prof. Leonor Briones

Mucho se ha hablado de la asociación público-privada (PPP). Es aquí donde los sectores público y privado se combinan para producir resultados favorables a la nación. En la práctica, esto ha resultado en proyectos de infraestructura de transporte ​​en Luzón. Visayas y Mindanao han quedado bastante al margen. El presidente Rodrigo Duterte va a cambiar esto, que es en parte la razón por la que la friolera de 62 por ciento de mindanaenses votaron por él. En una contienda presidencial en la que hubo cuatro candidatos fuertemente apoyados, esto es un mandato notable.

Pero el PPP más grande y con mayor apoyo se encuentra en el mundo de la educación. En este caso, el sector privado, formado por los estudiantes y sus familias, se combinan con el sector público en forma hasta el momento desafortunada del Departamento de Educación para producir una población educada. No nos olvidamos de las familias de los estudiantes que a menudo hacen sacrificios increíbles para que el estudiante pueda desarrollar su potencial.

Durante aproximadamente 12 años hemos tenido el programa Brigada Eskwela en que los padres aportan tiempo y dinero durante el verano para que las escuelas estén listas para su ocupación cuando los estudiantes regresan en junio. Lamentablemente, lo que comenzó como un espléndido ejemplo de voluntariado ha cambiado su carácter, porque se ha colado un aspecto coercitivo. Se reportaron amenazas de parte de los funcionarios de educación que insinúan sombríamente que los estudiantes no podrán inscribirse si los padres no apoyan el programa.

Es un lugar común que muchos de los que tienen éxito en los más altos niveles de la academia provienen de contextos económicamente precarios.

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La elección presidencial de 2016 se libró de forma decisiva entre los que querían más de lo mismo, representados por Mar Roxas, y los que querían cambios potencialmente radicales.

Los votantes eligieron cambios radicales. Esto comporta un alto riesgo, pero también compensaciones potencialmente elevadas para la subsistencia de las personas.

El presidente Duterte ha elegido a la doctora Leonor Briones como Secretaria del Departamento de Educación. Su defensa del sistema de aprendizaje alternativo está dirigido a aquellos que, por una u otra razón, no se han beneficiado del sistema de educación formal. En consecuencia, muchos no saben leer y escribir. Uno de los Objetivos de Desarrollo de las Naciones Unidas es que el 100 por ciento de las niñas y los niños completen la educación primaria. Es de esperar que el sistema de aprendizaje alternativo ayude a Filipinas a lograr este objetivo.

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Briones tiene un currículum impresionante. Antes de su nombramiento como Secretaria del Departamento de Educación, fue responsable de Social Watch Filipinas. Desde 1998 hasta 2001, fue tesorera nacional.

El presupuesto 2016 para la educación es de casi 440 mil millones de pesos (un dólar equivale a 47 pesos filipinos), el más grande, por lejos, de cualquier departamento gubernamental.

El Secretario de Presupuesto, Benjamin Diokono, ha propuesto para 2017 un presupuesto gubernamental de alrededor de 3,3 billones de pesos, aproximadamente 10 por ciento más que en 2016. Esto indica que el presupuesto de educación será de alrededor de 480 mil millones de pesos en 2017.

Espero que Briones sea clara en cuanto a lo que se logrará con el presupuesto de educación. La crónica falta de recursos debe ser abordada.

El miércoles voy a ampliar algunos problemas educativos actuales.

Por Neil Honeyman.

Fuente: Publicado en el diario Sun.Star Bacolod el 18 de julio de 2016.