Recuperación de NUESTRO transporte público

POR ALANA DAVE, FEDERACIÓN INTERNACIONAL DE LOS TRABAJADORES DEL TRANSPORTE (INTERNATIONAL TRANSPORT FEDERATION, ITF)

El transporte urbano es un sector en el que los ámbitos industrial y político están muy conectados. El transporte público es un servicio fundamental del que dependen millones de personas en todo el mundo. Las autoridades públicas son actores fundamentales en este sector por su función de empleadores y como los encargados de la toma de decisiones. El sector posee una gran importancia estratégica en la vida económica y social de las ciudades. Por lo tanto, para la fuerza de trabajo, la lucha de poder no solo ocurre en los lugares de trabajo con los empleadores (privados o públicos), sino que también se da en el ámbito público, donde se toman las decisiones sobre la propiedad, el control, la organización y la financiación de los servicios públicos. Durante muchos años, los afiliados a la ITF han estado en contra del modelo neoliberal de la privatización y la desregulación, por lo que han apoyado la propiedad y la inversión públicas en infraestructura y operaciones, así como la rendición de cuentas democrática del modo en que se gasta el dinero público. Se reconoce que ahora este cambio es mucho más urgente, debido a la crisis climática.

Los sindicatos de transporte público ocupan una posición estratégica importante en las ciudades. No obstante, su capacidad para ganar en conflictos laborales se ha visto afectada y debilitada gravemente por una gran ofensiva contra los sindicatos y los trabajadores, incluida la capacidad de huelga. La ITF se está enfocando en reconstruir la fuerza laboral en ciudades específicas y en diferentes medios de transporte, mientras nos posicionamos políticamente para luchar por un sistema de transporte público que satisfaga las necesidades de la mayoría de las personas, así como también del medio ambiente. Estamos reclamando el significado de lo “público” en los intereses de la justicia social y medioambiental, en lugar de hacerlo por los mercados y las ganancias privadas.

NUESTRO transporte público debería garantizar lo siguiente:

  • Las necesidades y los derechos de millones de trabajadores que dependen del transporte público para sus empleos y que mantienen el transporte público en movimiento.
  • Los derechos de los sindicatos de transporte público de todo el mundo que han construido y mejorado el sector por medio de la negociación de mejores términos y condiciones de empleo para los trabajadores.
  • Las necesidades y los derechos de millones de trabajadores informales cuyos medios de subsistencia dependen de la prestación del transporte público.
  • Las necesidades y los derechos de millones de personas comunes que dependen del transporte público para trasladarse en las ciudades.
  • Las necesidades y los derechos de millones de personas comunes que aún no tienen acceso adecuado al transporte público.
  • Las necesidades y los derechos de grupos discriminados o marginados, como las mujeres, los ancianos, los jóvenes y las personas con discapacidades.

¿Cuáles son nuestros objetivos? Buscamos construir fortaleza sindical entre los sistemas de transporte público integrados y fortalecer los derechos organizativos y de empleo para los trabajadores y los sindicatos. A largo plazo, nuestro objetivo es obtener modelos alternativos de transporte público basados en el trabajo decente y la propiedad pública democrática. No todos pueden expresar su opinión respecto del modo en que se gestiona el transporte público y a beneficio de quién. Con mucha frecuencia, la planificación del transporte público no incluye las opiniones de los verdaderos expertos: los trabajadores y los pasajeros. Si organizamos a los pasajeros y construimos alianzas estratégicas, lograremos hacer más visibles las historias, las experiencias y las necesidades de los trabajadores y los pasajeros.

Tal como expresó Francisco Mora, presidente del Sindicato Nacional de Trabajadores de Rama, Servicios de la Industria del Transporte y Logística de Colombia, afiliada de la ITF:

“Creo que no solo somos trabajadores del transporte, antes que nada, todos somos usuarios del transporte, y también lo son nuestras familias y amigos. Debemos asegurarnos de que el transporte en las grandes ciudades se vuelva más humano y de que las ganancias no se consideren antes que las necesidades de la gente”.

Alana Dave es líder del programa “Our Public Transport” (Nuestro Transporte Público) en la ITF.